Tres jóvenes menonitas en Ucrania y el sueño de volar
- Redaktion

- 24. Okt.
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A principios del siglo XX, cuando volar todavía era una visión audaz, tres jóvenes menonitas en la Ucrania rusa intentaron desafiar las leyes de la gravedad. Heinrich Plenert, Kornelius (Cornelius) Hildebrand(t) y Peter Unrau, de la colonia de Chortitza, construyeron entre 1907 y 1909 su propio avión: primero un simple planeador y luego una máquina motorizada. Sus experimentos se cuentan entre los primeros intentos de este tipo en Europa del Este y muestran curiosidad técnica, valentía y habilidad artesanal.
El nacimiento de un sueño
En 1907, cuando los hermanos Wright ya habían volado seis años antes en Kitty Hawk, los aviadores franceses y británicos experimentaban con nuevas máquinas, y canadienses como Bell y McCurdy habían probado su Silver Dart, Rusia aún vivía como un “gigante dormido”. La mentalidad predominante era: “Si Dios hubiera querido que los humanos volaran, les habría dado alas”.
A pesar de estas reservas, los estudiantes universitarios Henry Plenert, Kornelius Hildebrand y Peter Unrau decidieron construir su propia máquina voladora. Con una mezcla de conocimiento técnico, habilidad artesanal y curiosidad nació un planeador que fue probado en la llana estepa rusa.
HUP – el primer planeador
El primer aparato, HUP (“Saltar”, por las iniciales de los constructores), era un planeador biplano. Los jóvenes menonitas lo equiparon con esquís para deslizarse sobre el césped y usaron dos caballos para proporcionar la fuerza de despegue. Un poderoso semental y una yegua veloz arrastraban la máquina por el aire, donde planeaba suavemente sobre la estepa. A pesar del escepticismo inicial en la comunidad profundamente religiosa, los experimentos atraían multitudes; a veces se cobraba entrada y en otras ocasiones se recibían donaciones voluntarias.
HUP II – el intento de vuelo motorizado
En 1909 llegó el siguiente paso: el avión motorizado HUP II. El motor de cuatro cilindros refrigerado por aire se construyó a mano en la fábrica de Hildebrand, y las alas se fabricaron en Alexandrovsk. Solo la hélice provenía de Alemania. Debido a los altos costos, nuevamente se tuvieron que usar esquís, ya que las ruedas no eran asequibles.
En una oscura y nebulosa noche, la máquina se ensambló y se arrastró hasta Chortitza con ayuda de caballos. Henry Plenert realizó el vuelo de prueba. Aunque el avión ya contaba con motor, para el despegue aún se necesitaban los caballos. Con un rugido ensordecedor, el motor arrancó, los caballos galoparon más rápido que en los vuelos de prueba y, cuando el avión alcanzó la velocidad necesaria, se soltó la cuerda y el HUP II despegó por sí mismo. Pero luego la hélice se rompió y el avión se estrelló. Afortunadamente, el piloto no resultó herido y el proyecto fue abandonado.
La causa de la ruptura de la hélice sigue siendo desconocida hasta hoy: se sospecha de un defecto en la hélice, un trozo de cuerda que quedó atrás, una piedra levantada por el aire o un cable de sujeción que se rompió.
Una vida marcada por la técnica y los conflictos
Tras el accidente, los caminos de los tres se separaron:
· Kornelius Hildebrand estudió ingeniería mecánica en Darmstadt y más tarde asumió responsabilidades familiares en la fábrica.
· Peter Unrau continuó con sus investigaciones técnicas, construyó barcos y motocicletas, incluso recibió la Orden de Lenin, pero más tarde fue víctima de las purgas de Stalin.
· Henry Plenert emigró a Canadá, se dedicó a la agricultura en Saskatchewan y luego en Winnipeg, y llevó una vida menonita tranquila y piadosa. Pocos conocían su contribución a la aviación temprana.
Un legado olvidado
El proyecto HUP, hoy conocido solo a través de fotos descoloridas, correspondencia y relatos orales, fue probablemente la primera máquina voladora diseñada, construida y parcialmente volada por menonitas en Rusia. Aunque el tiempo, los cambios políticos y las guerras destruyeron mucho, el recuerdo de esta obra maestra temprana de la aviación persiste.
Fuentes y referencias
· Artículo de Peter Lorenz Neufeld en Mennonite Historian, marzo de 1991
· Relatos orales de la colonia de Chortitza
· Mennonite Heritage Archives (Winnipeg, Canadá)
· Plett Foundation: Estas piedras – Historia de los menonitas rusos
· Informe de viaje Rappensprung (2019): “Hildebrandt, Unrau, Plenert – los pioneros menonitas de la aviación”


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